lunes, marzo 22, 2010

Mi lector de libros: KINDLE DX


Ya hace dos meses que procedí a dar el paso. Me compré, justo cuando anunciaron que saldría al mercado, el Kindle DX, un lector de libros electrónicos con pantalla de formato grande (9,7”, contra las 6” normales). El objetivo de la compra no es (aún) comprar libros en formato electrónico.

Los objetivos son tres:

1) Se trata de leer libros que tengo en formato PDF, bajados gratuitamente de Internet. De esta forma no tengo que imprimirlos para leerlos.
2) Por otra parte, de buena mañana, me bajo El País (estoy suscrito) en formato PDF, así mi santa lo coge en formato papel en el quiosco y no nos peleamos. Así podemos leer los dos el diario a primeras horas del día.
3) La segunda es que, pronto por la mañana, hago un barrido de todas las noticias que me interesan. Las copio en un documento Word y de ahí las paso muy rápido a un único PDF que trasmito por USB (lo podría hacer por email) al Kindle. De esta forma puedo leer esas noticias en una buena butaca o tumbona en la terraza, sin tener que estar delante del PC dejándome la espalda y la vista.

En el Kindle DX puedes poner música y escucharla mientras lees. Puedes bajarte los libros directamente desde Amazon (se conecta vía satélite), y también muchos diarios, entre ellos El País, que si estas suscrito en la suscripción vía Amazon te lo envían directamente cada mañana al lector.

Caben 3.500 libros en su memoria. Puedes seleccionar (no en los PDF’s) segmentos del libro, o sea, citas, que puedes pasar al ordenador.

El Kindle DX tiene una dirección email y te pueden enviar o enviarte documentos PDF.

El texto gira según la orientación del Kindle. Si bien en los libros se puede variar el tamaño de letra, esto no se puede hacer con los PDF’s, pero sí cambiando la orientación y leyéndolos a lo largo.

Como la pantalla es una simulación de la letra impresa, no cansa la vista. Es perfecto.

Le he comprado unas tapas negras que se enganchan al lector, quedando protegido y se puede guardar así, como un libro más, en la librería.

La foto está hecha en mi casa y puede verse al fondo como mis libros miran asustados al intruso. ¡Pánico en la biblioteca! Pero de momento no han de temer nada. Para mí (¡mientras los editen así!) los libros serán siempre en papel.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Vec que de fons, els llibres que surten a la cantonada de sota a la dreta són de muntanya....què diria el sr. Freud??

Víctor i Cris

 
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